Y si Caperucita roja hubiera domesticado al lobo con su inocente mirada...
Y si el lobo sólo quería proteger a la niña de los peligros del bosque...
Y si el malo del cuento fuera el cazador que exterminaba animales sin piedad...
A fin de cuentas...todo es del color del cristal con que se mira.
No hay comentarios:
Publicar un comentario